Existen muchas dudas con respecto a los efectos del café. ¿Es bueno o perjudicial para nuestra salud? Lo cierto es que hay numerosos estudios científicos que corroboran los beneficios de este y que hacen de esta bebida la opción ideal tanto en el desayuno como después de la comida o entre horas.
Por poner sólo algunos ejemplos, los investigadores han identificado la relación entre beber café y una menor tendencia a padecer diabetes, enfermedades cardiovasculares, esclerosis múltiple y varios tipos de cáncer. Incluso, algunos de sus componentes podrían ayudar a combatir enfermedades neurodegenerativas como el párkinson o el alzhéimer.
A continuación, haremos un breve repaso de algunos de los principales beneficios de una de las bebidas favoritas en Occidente:
1) El café mejora algunas funciones cerebrales. Nada más consumirse, la cafeína actúa en el cerebro aumentando sustancias como la dopamina o la norepinefrina, que aceleran la actividad cerebral. De este modo, se favorece la concentración, la memoria, los niveles de energía, los tiempos de reacción o la función cognitiva en general.
2) Mejora nuestro rendimiento físico. Una de las ventajas de la cafeína es que aumenta los niveles de adrenalina. Esta hormona prepara a nuestro cuerpo para un esfuerzo físico excepcional: hace que las células grasas descompongan la grasa corporal, liberándola como ácidos grasos libres, que usamos como combustible cuando hacemos ejercicio.
3) Mejora nuestro estado de ánimo. La cafeína estimula el sistema nervioso central y aumenta la producción de neurotransmisores como la serotonina, la dopamina y la noradrenalina, que mejoran el estado anímico y ayudan a combatir la depresión.
4) Contiene nutrientes esenciales. Cuando hablamos del café nos viene a la mente principalmente la cafeína, pero una sola taza de café contiene gran cantidad de nutrientes esenciales para nuestro organismo. Algunos de estos nutrientes son el magnesio, potasio, niacina y vitaminas B2 y B5.
También está demostrado que el café contiene gran cantidad de antioxidantes. Según el CSIC, esta bebida es una de las principales fuentes de antioxidantes en Occidente.
5) Es bueno para el corazón. En contra de lo que se piensa, ¡la cafeína no es mala para el corazón! De hecho, se ha llegado a la conclusión de que reduce el riesgo de sufrir un infarto. El café disminuye la cantidad de calcio en las arterias coronarias minimizando las posibilidades de que se produzca un infarto de miocardio.
6) Ayuda a prevenir enfermedades. Diversos estudios revelan que las personas que consumen café presentan hasta un 67% menos de posibilidades de padecer diabetes. Al parecer, los beneficios de esta bebida para los diabéticos se deben a su alto contenido de antioxidantes.
Asimismo, hay un 65% menos de probabilidades de tener alzhéimer y hasta un 60% de sufrir párkinson gracias a la cafeína. De hecho, el consumo de café descafeinado no ha mostrado ninguna de estas dos ventajas.
Otros estudios revelan que el café ayuda a prevenir ciertos tipos de cáncer, como el de colon, próstata o de mama.
Como podemos observar, son múltiples las ventajas del café para nuestra salud física y mental. Si bien no debemos abusar de su consumo, nada impide que lo disfrutemos nada más levantarnos o en la sobremesa. Sin duda, esas mañanas repletas de trabajo se harán más llevaderas y los ratos en familia o con los amigos tras la comida, ¡todavía más placenteros!